Nacimiento del Ebro. Pintando árboles. Paint trees in watercolour. 214

Tercera clase. Tercer Curso.       Nacimiento del Ebro


          "El Ebro nace en Fontibre, provincia de Santander, pasa por Logroño y Zaragoza y desemboca en Amposta en la provincia de Tarragona..." declamábamos cuando éramos niños en las clases de nuestra escuela. La geografía la aprendíamos de memoria... pero hay otra forma de aprenderla, más hermosa, pateando. 
           Me impresionó el conocer el nacimiento de nuestro río más caudaloso. España no es un país de grandes ríos, es verdad. Brotaba de la tierra a borbotones... y al poco ya parecía un riachuelo tranquilo, sin las prisas de los que nacen entre peñas o ladera arriba. Era un paraje idílico. Los rayos atravesaban las ramas de los árboles y pintaban grandes sombras.

Nacimiento del Ebro.

Foto: Hilario de las Moras. 

          1. Partimos de lo realizado en clase. 

          Para intentar facilitar el trabajo a los que están comenzando, he realizado la primera parte del trabajo delante de ellos. Esencialmente hemos acometido estos pasos:

          Hicimos un dibujo sencillo a lápiz, señalando las orillas en las que están los árboles, y el horizonte visible. Se pueden añadir algunas piedras.

          Manchamos el fondo con un tono azul cerúleo. Prácticamente desde la mitad hacia arriba. Y trabajando húmedo sobre húmedo, añadimos unas manchas verdes luminosas (verde vejiga con amarillo limón o winsor). Sobre esta primera mancha añadimos tonos más oscuros. Basta con aumentar en la misma crema un poco más de azul ultramar. Así nos quedó de momento. 

Imagen 1. Hilario de las Moras.

          2. Intensificamos algunas zonas del fondo de árboles luminosos. 

          Lo ideal es que esta acción la hubiéramos hecho cuando aún el papel estaba húmedo, pero por el ritmo de la clase presencial (intentando explicar paso a paso cada cosa) no nos fue posible. Lo que haré será humedecer nuevamente la zona superior con agua limpia y sobre ese papel húmedo continuar intensificando, intentando no revolver lo que ya está pintado abajo.
  

Imagen 2. Hilario de las Moras. 

          3. Sacamos algo de pintura, para insinuar los árboles del fondo.  

          Podemos hacer los troncos del fondo, tanto teniendo la acuarela en húmedo como una vez seca. Si utilizamos el primer método, los troncos se integrarán más. 
          Esta vez vamos a sacar pintura con un pincel humedecido en agua limpia. Secamos el pincel con un paño y lo pasamos por la acuarela, insinuando troncos. De esta forma, repetida tantas veces como sea necesario, extraemos algo de la pintura. Es resultado es sugerente para algunas acuarelas, sobre todo en temas en donde pintemos abedules, chopos...

Imagen 3. Hilario de las Moras. 

          4. Dejamos terminados los árboles del fondo. 

          Algunos troncos los dejaremos casi blancos, otros les daremos color y sombra. Estoy pensando que el árbol de la derecha lo vamos a suprimir, pues no queda "natural". Sí, creo que va a ser mejor. 
          Los árboles de la izquierda parecen abedules, los de la derecha, negrillos. Los colores de sus troncos tienen la gama del siena tostado, con algunas trazas de azul ultramar, para conseguir un tono más oscuro. 

Imagen 4. Hilario de las Moras. 

          5. Nos toca dibujar las rocas del primer término. 

          Lo primero, dibujar las más grandes, descubriendo las zonas que van a la luz y las que quedan en sombra. Quizá ésto sea lo más importante cuando nos decidimos a mancharlas. 

Imagen 5. Hilario de las Moras. 

          Las rocas pueden ser de distintos colores. Para pintarlas hay que seguir algunos pasos, dependiendo de lo cercana que estén y de la importancia que tengan dentro de la composición. Ya dediqué una clase para hablar de cómo pintarlas. 
          Si deseas profundizar más en este tema, visita la clase del día 6 de diciembre del 2013. "rocas en acuarela. Rocks in watercolour". Allí encontrarás un detallado proceso para pintar piedras. 

          6. Completamos el primer término y damos los últimos retoques.

          Lo normal, en el primer término, es que se trabaje más algunos detalles y que pasemos a tonos más cálidos. Lo más lejano se pinto con colores más frío (azules) y lo más cercano, con cálidos. 
          Aumento el número de rocas y las perfilo más. En toda esa zona hay gran cantidad de color siena tostado, mezclándose con pinceladas azules para que dé impresión de que el agua brota del suelo ahí mismo. 
          He intensificado algunas zonas de los árboles de la derecha con los mismos verdes usados anteriormente, añadiendo un poco de azul ultramar para darles más intensidad. 
          Por último añado sombras a toda la acuarela. Esta vez he usado un violeta compuesto de azul ultramar y de alizarín.
          Con ésto termino y firmo. 

Nacimiento del Ebro. 214. Hilario de las Moras.

Acuarela. 52 x 38

TRABAJOS RECIBIDOS

          Como ya comenzamos a hacer en cursos pasados, iremos añadiendo en esta sección los trabajos que vosotros me mandéis. Tanto los que participáis en la clase presencial como los que sean seguidores de este blog por internet. 
          Para mandar vuestros trabajos podéis utilizar mi correo, hilario49@gmail.com

Carmen Cabezas. Majadahonda. Madrid.

Francisco Cucharero. Majadahonda.

Camille Downes.  Majadahonda. Madrid.

Concha. Majadahonda. Madrid. 

Luis Vicente. Majadahonda. Madrid. 

Margarita Novoa. Majadahonda. Madrid. 

Antonio Conejero

Faro de Cudillero. Pintando un cielo. Paint a Sky in watercolour. 212

          Segunda clase. Tercer Curso.        El faro de Cudillero

          Cudillero es un encantador pueblecito pesquero asturiano. En la Punta Roballera se encuentra su faro inaugurado en 1858 que sustituyó a otro más antiguo en donde las mujeres de los pescadores encendían una hoguera cada día. Mucho más tarde, en 1930 fue electrificado. Hoy nos sirve su imagen para hacer un ejercicio de cómo pintar un cielo en acuarela. 

Faro de Cudillero.  Foto: Hilario de las Moras. 

          1. Organizamos los elementos de nuestro papel y dibujamos.

          Esta vezdedicaremos la mayor parte del papel para la zona del cielo. Incluso podríamos seguir más o menos la distribución de la foto. Digoésto, pues una cosa es la foto y otra la organización que nosotros hagamos en nuestro dibujo. En este caso pondremos un poco más de mar. 
          Ya en otra lección de este mismo taller explicamos distintas formas de tratar un cielo. Hoy seguiremos un esquema sencillo, ñque después aplicaremos a nuestro dibujo. 

Imagen 1. Hilario de las Moras. 

          Hemos aumentado la zona de mar hasta un tercio. La vertical que pasa por el faro también está más o menos a una distancia de un tercio del margen derecho. Hay una zona de mayor intensidad de luz y otras en las que se va reduciendo. 

          2. Dibujamos. 

          Atendiendo a esos criterios, dibujamos in señalar mucho la línea del horizonte y la silueta del acantilado. Las nubes no se dibujan. 

Imagen 2. Hilario de las Moras

          3. Elegimos los colores del cielo y humedecemos el papel 
          Antes de comenzar he colocado una cinta de papel de carrocero, simple cinta que utilizan los pintores de paredes para preservar los maarcos de las puertas antes de pintar. No es necesario, pero esta vez la he puesto. 
          Fabrico los colores. He usado un azul cerúleo para las zonas azules más claras. para los nubarrones, azul ultramar junto con siena natural, xonsiguiendo un gris. 
          Humedezco el papel con agua limpia. 
          Vamos aplicando manchas con los dos colores. Se puede usar un pincel plano ancho. Lo que llamamos aquí paletina. 

Imagen 3. Hilario de las Moras

          4. Intensificamos unas zonas y matizamos otras. 

          Mientras el papel esté húmedo podemos trabajar la aguada. No se trata de repetir la foto, con todo detalle, sino hacer un cielo agradable. Lo que estamos viendo, si trabajamos al aire libre, o la foto nos puede servir de pauta.

Imagen 4. Hilario de las Moras.

          Esto de hacer un cielo, para un principiante, no suele ser nada fácil, aunque lo parezca. Si no sale bien a la primera se puede intentar una segunda vez, pero no hay que obsesionarse. La práctica nos irá enseñando poco a poco.
          Una vez seco el cielo, ya no se toca. Si lo queremos "arreglar", la mayoría de las veces lo que hacemos es estropearlo. 

          5. Dejamos el cielo y nos dedicamos al mar y al acontilado. 

          Para el mar, humedecemos de nuevo la zona y hacemos una aguada en paralelo con el horizonte. La zona más intensa estará en el horizonte y se va aclarando hacia el primer plano. Los colores serán muy similares al del cielo, pues el mar actúa como un espejo.
          Para el acantilado metimos varios colores, según las zonas, que más adelante matizaremos. Los dejamos que se mezclen entre ellos. Quedará más bonito. 

Imagen 5. Hilario de las Moras

          He dado pinceladas, sobre húmedo con el fin de que se entremezclen los colores. Ocre amarillo, siena natural, siena tostado, tierras y verdes con tierras.


          6. Matizamos el acantilado y las edificaciones. Firmo. 

          Una vez secos los colores de base, voy matizando el acantilado. Esta vez serán las tierras, el siena natural y el tostado los que harán el trabajo. 
          He terminado la acuarela. Me gusta el resultado. Lo firmo. 

Faro de Cudillero. 212. Hilario de las Moras. Acuarela. 52 x 38

            TRABAJOS RECIBIDOS

         Como ya comenzamos a hacer en cursos pasados, iremos añadiendo en esta sección los trabajos que vosotros me mandéis. Tanto los que participáis en la clase presencial, como los que sean seguidores de este blog por internet. Es una forma estupenda de enriquecer este taller de iniciación a la acuarela. 
         Para mandar vuestros trabajos podéis utilizar mi correo, hilario49@gmail.com

Francisco Cucharero. Majadahonda. Madrid. 

Antonio Conejero